1 de octubre (Urgente.bo)- En los últimos días ha sido aprehendido el exgerente de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), Franklin Flores, y junto a él dos funcionarios, acusados de conducta antieconómica e incumplimiento de deberes. Flores además es investigado por hechos de corrupción en el caso de la planta procesadora de papa, construida en El Alto. Una magistrada también está involucrada.
La planta procesadora de papa representó una inversión de 162 millones de bolivianos, equivalente a 23.000.000 millones de dólares.
En marzo de este año, la activista María Galindo asistió a la planta para corroborar denuncias acerca de su no funcionamiento. En ese entonces, la recibieron el exgerente Franklin Flores y el viceministro de Políticas de Industrialización, Luis Siles.
Galindo denunció en ese entonces que la licitación no se hizo de forma transparente y apuntó a la magistrada Rosmery Ruiz Martínez, magistrada del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Tarija, de quien aseguró que es dueña del 50% de la empresa constructora Piloto SRL que se adjudicó la construcción de la planta.
“Cuenta con 13 bienes, según su declaración jurada, y 3.209.000 en bienes activos. Ella es propietaria del 50% de la empresa que se ha adjudicado 23 millones de dólares para construir la planta piloto (…) esto se queda en familia, no es una licitación limpia”, expuso la activista.
Asimismo, detalló que Ruiz Martínez es propietaria de 29.200 cuotas, equivalente al total del 50% del capital. En ese sentido, afirmó que ella es dueña de la mitad.
En ese entonces, Franklin Flores aseveró que la empresa hace procesos públicos y transparentes.
En julio de este año, la magistrada denunció un presunto plan para destituirla de su cargo como magistrada titular. Aseguró que el plan fue discutido en una reunión con el magistrado suplente Grover Mita, el exministro César Siles y otros.
