El agua es un recurso cada vez más preciado en Bolivia, uno de los países más afectados por el calentamiento global. En el país, desde 1968 la cooperación suiza se empeña en mejorar la seguridad alimentaria y las condiciones de vida de las comunidades más vulnerables. En los últimos años dicha campaña se ha focalizado en estrategias de adaptación al cambio climático. Variedades de semillas más resistentes, nuevos sistemas de riego, cuencas de recolección de agua y resguardos contra inundaciones son parte de los objetivos de la cooperación suiza para contribuir a la resiliencia de la población boliviana.
El embajador de Suiza en Bolivia, Roger Denzer, se refirió a los 50 años de corporación a Bolivia. En un diálogo con la revista Oxígeno, explica que,“en un principio, la Cooperación Suiza en Bolivia se concentró en el sector agropecuario, para luego complementarse con otras actividades como el fortalecimiento institucional o el apoyo –entre otras – a reformas sectoriales y también macroeconómicas. En la última década nos hemos dedicado a la gobernabilidad, al desarrollo económico, así como al cambio climático y medioambiente”.
La cooperación suiza contribuye al Plan Nacional de Cuencas (PNC) ejecutado por el Ministerio de Medio Ambiente y Agua de Bolivia, desarrolla acciones con los gobiernos autónomos departamentales y municipales. “La finalidad del proyecto es contribuir en la mejora de las condiciones de vida de la población rural y de pequeños centros urbanos de la región andina y valles de Bolivia en un contexto de vulnerabilidad social, económica y ambiental”, refirió el diplomático.
Denzer explicó que durante los 4 años de ejecución del proyecto hubo resultados interesantes en los distintos departamentos. “Aumentamos un 90% la seguridad alimentaria por el simple hecho de que el agua está llegando con calidad, cantidad y la sequía no va a destruir las cosechas”.
Asegura que actualmente 13.000 familias aplican buenas prácticas de manejo de suelo y agua, permitiéndoles incrementar la productividad y diversificación agrícola en 4.000 hectáreas. E incluso Gobiernos Autónomos Departamentales de Cochabamba, Chuquisaca, Potosí y Tarija incluyen en sus presupuestos de inversión pública los temas agua y cuencas.
Con respecto a las nueva estrategia de Cooperación: “Estamos listos para trabajar cuatro años más en Bolivia, es un reto importante y una gran oportunidad para seguir apoyando al país, contribuyendo en la lucha contra la pobreza y la reducción de la desigualdad”,-agregó- “Nuestra Estrategia de Cooperación 2018 – 2021 está diseñada con base en los planes de Bolivia y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030”, sostuvo.
Nuevos proyectos
En cuanto a los nuevos proyectos de la cooperación, la Estrategia de Cooperación Suiza para Bolivia 2018-2021 desembolsará 21 millones de dólares por año y comprende tres ámbitos temáticos: gobernabilidad (por ejemplo Vida sin violencia para las mujeres, Acceso a justicia); desarrollo Económico (formación técnica profesional, apoyo a micro y pequeñas empresas (MyPES), oro responsable, eficiencia aduanera); así como cambio climático y medioambiente (adaptación al cambio climático, resiliencia urbana, gestión integral del agua y gestión ambiental municipal en rellenos sanitarios y tratamiento de aguas servidas).
Comprende dos temas transversales: Género y Gobernabilidad, y principios de trabajo como Reducción del riesgo de desastres y Gestión de proyectos sensibles al conflicto (incluyendo interculturalidad).
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