La Paz, 21 de noviembre (Urgente).-Los bosques son fundamentales para mantener el equilibrio en los procesos que hacen posible la generación de lluvias. En Bolivia cada año se deforesta más de 250 mil hectáreas de bosques a favor de la agroindustria en Santa Cruz y la plantación de coca en La Paz. Esa es una de las causas de la “sequía crítica” que atraviesa el departamento de La Paz y otras regiones del país.
“La pérdida de bosques no solo afecta de manera directa a la zonas donde se ha perdido el bosque, sino modifica patrones climáticos en todo el país”, remarcó la directora de la Fundación Amigos de la Naturaleza, Marlene Quintanilla.
Bolivia es uno de los diez países megadiversos del mundo. La mayoría de sus bosques se localiza en las Tierras Bajas, los Yungas y los Valles secos interandinos, ocupando aproximadamente 47 millones de hectáreas hasta el año 2010.
Desde la década de los 80, la pérdida anual de bosques por efecto de la deforestación se triplicó. Es una tendencia que se mantiene ya por más de 20 años, al punto que sólo el 2013 se perdió 256 mil hectáreas.
En términos proporcionales, Santa Cruz es el departamento con mayor pérdida de bosque, representando el 78% del área total deforestada; después el norte del departamento de Beni representa el 7%, Cochabamba el 6% y el restante 9% se encuentra entre los departamentos de La Paz, Pando, Tarija y Chuquisaca.
La principal amenaza de la deforestación de los bosques es la transformación en tierras agrícolas o en espacio para la agropecuaria.
En el departamento de Santa Cruz los bosques están siendo exterminados por la expansión de la frontera agroindustrial con la producción de soya, maíz, entre otros productos.
En el sector de los Yungas los bosques se reducen para la producción de la coca. Un estudio de la Fundación Tierra señala que en los Yungas más del 80% de la tierra cultivada se destina a la coca, contrariamente disminuyen los cultivos de cafetales, frutales y otros. Solo basta con ingresar a Google Earth y acercarse a los Yungas para apreciar la mancha del desastre ambiental, dice un experto de la institución.
La deforestación es una de las principales causas para la sequía en diferentes regiones del país y para la disminución de las precipitaciones pluviales. El nivel de las lluvias se redujo en un promedio del 10% a nivel nacional y las sequías se extendieron de tres hasta cinco meses.
“En Cochabamba llovía 84 milímetros ahora se ha visto que ha llovido apenas 2 milímetros”, dijo.
Desde la década de los 80 también se ha visto que se incrementó en un grado la temperatura en todo el territorio nacional, lo que significa que a mayor temperatura mayor pérdida de agua natural.
Los municipios carecen de un plan sostenible de manejo integral de las cuencas consideradas como la principal fuente de abastecimiento de agua para riego, de consumo humano y para la ganadería. Además, los nevados andinos desaparecen.