La Paz, 21 de septiembre (Urgentebo).- En una noche para el olvido, Wilstermann fue apabullado por 8 a 0 y se despidió de la Conmebol Libertadores Bridgestone de la manera más impensada.
Y es que después de la goleada que logró en Cochabamba (3-0), lo último que pasaba por su cabeza era, primero, eliminarse y en segundo lugar perder una diferencia tan amplia. Sobran los adjetivos para calificar lo mal que jugó el Aviador y, en contrapartida, lo bien que lo hizo River, que supo hacer valer su historia y su peso internacional. Por eso, River terminó el primer tiempo con una ventaja de 4 goles.
Además, el cuadro dirigido por Marcelo Gallardo tuvo a un arma letal en el ataque, que, a la larga, se encargó de eliminar a River él solo.
Ignacio Scocco, el delantero que había fallado dos claras oportunidades en el Félix Capriles, fue la figura descollante del equipo de la banda. Anotó 5 de los 8 goles del Millonario – tres de ellos antes de los primeros 20 minutos- y acabó con el sueño del equipo boliviano.
La faena la completaron Enzo Pérez, en dos oportunidades, e Ignacio Fernández.
Y es que la clave del encuentro estuvo en el planteamiento impuesto por ambos técnicos. Mientras que Mosquera fue al Monumental sin mayores ambiciones más que defender el resultado en Cochabamba; Gallardo cambió su esquema de juego, pudo una línea de 5 mediocampistas, la mayoría con vocación ofensiva, y doblegó a un endeble equipo boliviano.
A eso se sumó también la mala noche que tuvo Raúl Olivares, el arquero había sido la figura del Aviador en toda la Copa, pero hoy no fue ni la sombra de lo que venía siendo.
Así, Wilstermann fue aplastado en Argentina y fue bruscamente despertado de un sueño que, hasta hace dos horas atrás, parecía estar en la palma de su mano.
