Los tiempos previstos en el calendario electoral para la realización de las elecciones del 17 de agosto próximo, avanzan inexorablemente, por lo que el tiempo que dispone el ciudadano para meditar su voto, se reduce cada día que pasa.
En ese marco, algunas de las fechas clave que el ciudadano debe tener presente son:
- 18 de abril, último día para la solicitud de registro de alianzas.
- Del 18 de abril al 7 de mayo está previsto el empadronamiento biométrico masivo.
- Del 9 al 19 de mayo, presentación de programas de gobierno de los partido o alianzas que participarán de las elecciones.
- Del 14 al 19 de mayo, inscripción de binomios presidenciales.
- Del 19 de mayo al 13 de agosto, están autorizadas las campañas electorales.
- Del 20 de mayo al 3 de julio sustitución de candidaturas por causa
- de renuncia ante el Tribunal Supremo Electoral
- El 1 de julio se harán públicas las listas de ciudadanos inhabilitados
- Entre el 1 y 4 de julio los inhabilitados podrán elevar su reclamo al TED o SERECI de cada departamento
- 17 de agosto, votación general
- 19 de octubre, segunda vuelta
Hay tiempo suficiente para que los candidatos que terciarán en los comicios encuentren la mejor manera de encandilar a sus votantes, con propuestas novedosas que no caigan en la cansina repetición de desgastados argumentos, y con el acompañamiento de canciones y pegajosas melodías con las que se identifiquen los electores, como sucedió en el pasado con ciertos candidatos.
En este escenario hay una inmensa variedad de personajes que van desde retornados, perseguidos, presos; a aquellos a los que denominan dinosaurios y a los nóveles juveniles (dinosaurios y pitufos, dicotomía creada por Tuto); pobres contra millonarios; y un importante grupo formado por quienes se resisten a aceptar el impacto del implacable paso del tiempo…
Casi todos ofrecen lo mismo: mejorar la economía, combatir efectivamente a la corrupción; las redes sociales están inundadas de posteos que recuerdan amores y desamores, fracasos, hechos buenos, aunque la mayoría malos de cuando ejercieron el poder; su militancia, en muchos casos que transitó de un color a otro desde que hicieron política; si fugaron o permanecieron en el país, etc.
Ahora es tiempo de renovar la política y la manera de hacer campañas, dado que las nuevas herramientas digitales dan un amplio margen a la creatividad. En años anteriores, hubo chispazos que dejaron profunda huella en la política nacional:
Recordamos, por ejemplo, la marcha mirista de las elecciones de 1989... El MIR triunfará, independientemente de que se haya tomado “prestada” la melodía original del APRA que fue primigeniamente presentada, en Perú, en 1980.
O a Percy Fernández hacer campaña desde un tractor, para ganar la alcaldía cruceña en 1993, acompañado por una contagiosa melodía… Tengo un tractor amarillo…
También está la cumbia villera que compuso e interpretó Aldo Peña en 2014 para Evo Morales, que le costó, al artista, el ostracismo de la sociedad cruceña.
Ahora que se acerca el momento del inicio de las campañas políticas, es pertinente recordar algunas líneas de un par de emblemáticas canciones, que transmiten el sentir popular:
Marcha de la bronca canción de protesta escrita por Miguel Cantilo en 1970 e interpretada originalmente por el dúo Pedro y Pablo.
Bronca porque matan con descaro
Pero nunca nada queda claro
Bronca porque roba el asaltante
Pero también roba el comerciante
Bronca porque está prohibido todo
Hasta lo que haré de cualquier modo
Bronca porque no se paga fianza
Si nos encarcelan la esperanza
Bronca, bronca
Cambalache aquel icónico tango argentino compuesto por Enrique Santos Discépolo, estrenado en 1934:
Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor
Ignorante, sabio o chorro, pretencioso o estafador
Todo es igual, nada es mejor
¡Lo mismo un burro que un gran profesor!
No hay aplazaos, qué va a haber, ni escalafón
Los inmorales nos han igualao
Si uno vive en la impostura
Y otro afana en su ambición
Da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos
Caradura o polizón
Qué falta de respeto, qué atropello a la razón
Cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón
Letras que se han olvidado, pero que reflejan una lacerante realidad actual, ¿seguiremos en el camino de que al votar se atropelle la razón?
En un país sumido en una debacle total, hoy se debe volver a votar; los candidatos, una serie de personajes antiguos y nuevos, serán sometidos a nuestros amores y desamores; estarán a merced de nuestros sentimientos; o, finalmente, cantaremos a voz en cuello la marcha de la bronca contra los políticos opositores que no tienen la capacidad unirse.
¿Qué es ser un votante consciente? ¿en qué realidad vivimos?, ¿no vemos que hoy la falta de estabilidad es, también, culpa de todos nosotros?, ¿dónde ha quedado la empatía?
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