06 de noviembre (Urgente.Bo).- Si bien, los últimos reportes de falta de agua orientan como la causa del problema a la sequía que se vive a nivel nacional, los pobladores y autoridades del municipio de Caranavi confirman que viven dentro de este círculo vicioso por varios años, “cada año es lo mismo”.
“Hace bastantes años ya hubo racionamiento debido al crecimiento poblacional, no hemos proyectado el crecimiento poblacional del municipio; y peor con el cambio climático y la sequía, el agua se ha reducido peor”, expresa el Secretario General del Municipio, Daniel Vega.
La población de Caranavi, según Vega, en los últimos años, prácticamente se ha duplicado de 30.000 a 60.000 personas, hecho que implica mayor requerimiento de servicios básicos, entre ellos, el agua, un recursos que conforme pasan los años, falta más.
Prácticamente la única cooperativa existente en el municipio ya no abastece a la población que debe buscar otras alternativas como la compra de agua, en el caso de las personas que cuentan con recursos económicos; y la búsqueda de agua en pozos posiblemente contaminados, para las personas de escasos recursos.
La desesperación por el recurso ha llevado a exigir a la población para que la empresa cooperativa pase a manos del municipio, para que entre sus autoridades y las nacionales se pueda encarar de mejor manera la falta del recurso hídrico.
Asimismo, Vega informó que se cuenta con 41 millones de bolivianos de parte del Gobierno Nacional para la ejecución del proyecto Caranavi con Agua, que consiste en la ampliación del sistema de agua potable, el cual se espera ejecutar de manera inmediata.
Sobre la campaña del municipio para el uso racional del líquido elemento, Vega expresa que se trata de una tarea casi imposible, debido a las altas temperaturas que se registra en el municipio de 25 hasta 35 grados, “prácticamente por la calor, la gente se baña hasta tres veces al día”, remarcó.
Hace un mes, la población del municipio de Caranavi enfrenta escasez de agua, el cual es racionada, dia por medio, el hecho según autoridades, se repite “cada época seca”, desde agosto hasta mediados de noviembre; sin embargo la escasez del recurso cada año es peor, y lo único evita perder la esperanza es la llegada de las lluvias.
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