Octubre 16, 2025 -HC-

El balotaje en el supermercado


Miércoles 15 de Octubre de 2025, 7:45am






-

En una anterior columna describí lo encontrado en el mercado Abasto antiguo sobre la votación para primer mandatario del país. Hoy me ocupo de lo encontrado en un supermercado.

Ir al “super” no es igual que ir al mercado Abasto, obviamente. Para empezar, en la calle, salir de la atmósfera recalentada a 36 grados para entrar al aire acondicionado, ya marca una diferencia sustancial entre uno y otro. Y también los clientes son diferentes. No hay empujones ni “carretilleros” gritando “¡permiso, permiso!”. Tampoco jugos milagrosos “supervitaminados” o las cariñosas vendedoras que le tratan a uno de “caserito”.

Al entrar, nos acercamos al “servicio al cliente” para dejar las carteras y todo lo que se pueda usar como bolsa. Mientras mi esposa espera su número de casilla, le pregunto a la chica que atiende el servicio “por quién vas a votar el domingo” y la chica “¡ay! No sé realmente, creo que por Tuto” y me alejo con mi esposa que no puede controlar su afán e impulso para comprar tanta mercadería al alcance de su mano. Camino detrás de ella y de mi nieta, siguiéndolas. Lo mejor es que en el “súper” no ejerzo como “corredor de bolsa”; en cambio, mi nietita (aquí sí puede venir), empuja el carrito que hay para las compras. Soy un simple e inútil espectador o acompañante de mi esposa que, con los ojos iluminados, ante mi desesperación, compra todo lo que puede.

Después de muchas vueltas y varias compras, llegamos a la sección de panadería. Hay más gente comprando pan. Mi esposa escoge los panes (siempre compra demás y de toda clase) y yo, detrás de ella y de mi nietita, me doy la vuelta y encuentro a una señora que al darse cuenta que la veo me sonríe amablemente y le lanzo mi pregunta “buen día, ¿ya sabe Ud. por quién votará el domingo?” y ella “Solo queda Tuto, ¿no?” y otra señora que estaba a su lado “¡ay si!, porque el otro es MIR nomás pues” y un señor gordito, al escuchar la charla “lo que pasa es que Rodrigo Paz escogió mal su acompañante…” y aparece un señor de casi dos metros de altura, interrumpiéndole “si, ese Lara es un loco de atar y hay que ser otro loco para votar por el” Mi esposa se da la vuelta y me hace una seña con los ojos como diciendo “qué haces hablando de política…” Pero ya se formó el junte y el grupo crece en interlocutores. Medio asustado por el tinte y dimensión que adquiere el tema, hago “mutis por el foro”, dejando el junte improvisado donde no cesan de hablar sobre el balotaje ante el reproche abierto de mi esposa “un día te vas a meter en líos por hablar de política” y yo “no lo hago, era una pregunta nomás y ahí se armó la gorda”. Mi nietita del alma que acaba de cumplir 10 añitos, “¡Sí abuela! ¡El abuelo solo preguntó a una señora por quién iba a votar, nada más y ahí se juntó la gente!” Mi esposa “y mira el zafarrancho que ocasionaste” “¿Cuál zafarrancho? Están hablando amigablemente” Después de comprar las “yapas”, nos encaminamos a las cajas para pagar lo comprado.

Delante nuestro, en la fila de una de las cajas, una pareja de brasileños espera su turno. ¿Él se da vuelta, me mira y me dice en perfecto portuñol “Você estava perguntando em quem votaria no domingo, certo?” “Si” le contesto “pero ustedes no votan en Bolivia, no?” “ Não, nós não votamos, mas também temos simpatia porque moramos na Bolívia hace muito tempo” “¿Ah si? ¿Y por quién es su simpatía?” “Moramos em um prédio onde há muitos estudantes bolivianos de toda a Bolívia, e conversamos muito com eles, e eles nos disseram que a melhor coisa a fazer é votar em, qual é o nome dele? Tuto..." “Tuto Quiroga” les completo “Ah sí” dice. Terminó de pagar y me da la mano al despedirse “Y vocé por quién va votar…” “Tuto, no hay otro” le contesto… La cajera “¿si no? Hay que votar por Tuto nomas” Sonrío y antes que yo abra la boca, ella dice “¿NIT?”

Son circunstancias, momentos y realidades políticas diferentes, pero no hay duda que las cosas son muy diferentes en el “súper”…

///

 

.