Agresiones 2.jpg

11 de octubre (Urgente.bo).- El paro cívico se concentró con mucha más fuerza en la capital cruceña donde hubo varios puntos de bloqueo y fue el epicentro. En La Paz se registraron duras fricciones entre los movilizados y los que lo rechazaron. En Cochabamba la Policía detuvo en los tres departamentos a al menos seis personas.
El presidente Luis Arce fue enfático en manifestar que no se volverá a periodos “nefastos de la historia boliviana” y dijo que se pretenden abrir nuevamente “unas minorías que solo conciben democracia cuando las mayorías están silenciosas y excluidas de la participación política en nuestro país, eso nunca más volverá a suceder”.
En opinión del politólogo, Marcelo Arequipa, esto es una muestra más que el país está polarizado y que una vez más Bolivia alcanza niveles de intolerancia elevados, los cuales se traducen en violencia.
“Se está generando una polarización elevada y en términos estratégicos, no es una buena idea del MAS el haber movilizado a sus sectores para poder repeler los bloqueos. Creo que es un error, porque en la idea de mostrar fuerza, al contrario, mostraron violencia”, declaró el analista político al portal Urgente.bo.
A su vez, Arequipa manifestó que Arce hace una mala lectura de que todas las protestas sean un nuevo “golpe de Estado” y es por ello dijo, que el gobierno se apresura en calificarlas de esa forma.
“Enmarcar la idea de que esta protesta de hoy, es otro intento de golpe de Estado, creo que lo limita en adelante”, argumentó.
En zonas como Max Paredes y Miraflores, los bloqueadores que sacaron una vez más las pitas a las calles fueron agredidos y rechazados por gente a fin al gobierno. En Calacoto, zona sur de La Paz, la situación fue casi similar, hubo golpes de puño y amagues de enfrentamientos.
En opinión del exministro y politólogo Hugo Moldiz, lo ocurrido hoy, no es más que la reacción de los que quieren trabajar y salir de la crisis económica, contra aquellos que solo quiere hacer política y desestabilizar al gobierno de Luis Arce.
“Eso (un golpe de Estado) no va a volver a ocurrir. El gobierno lee bien lo que pasó y está pasando. Primero, el gobierno tiene el 55.1% de legitimidad y no tiene un nivel de desgaste y, pese hay que hay esfuerzos, en que los actores del golpe del 2019, no lo lograrán. Por qué, porque no tienen el apoyo del empresariado, no los respaldan”, indicó.
En Los Lotes, Santa Cruz, de igual manera hubo golpes y agresiones. En la avenida Circunvalación, Cochabamba, se produjeron forcejeos, insultos y, finalmente hubo una la gasificación. Al menos dos personas fueron detenidas ese lugar, informó el viceministro de Régimen Interior, Nelson Cox.
En criterio del analista político, Paúl Coca, está no es la primera protesta cívica que se viene, sino que dice que habrá otras. Lamenta que el MAS no logra captar que la fuerza política se mide en las calles, "las calles fueron quienes sacaron a Evo Morales", subrayó.
“Esto apenas comienza. Esta no es la primera ni la única medida, recién van a empezar y se vendrán muchas más medidas de presión”, argumentó.
Coca coincide con Arequipa que Bolivia está polarizado y lamentó que prime la intolerancia y que el partido gubernamental haya sacado a sus bases a generar violencia y no respetar el derecho a la expresión y la protesta.