12 de septiembre (Urgente.bo).- En los últimos días llovieron críticas sobre algunos bolivianos que dieron apoyo a la Selección Argentina, vistiendo la camiseta de la Albiceleste y alentando a los jugadores que se enfrentarán a la Verde. Para el analista deportivo, Ernesto Rojas, hay dos factores que ocasionaron esta reacción, la furia por la figura futbolística de Lionel Messi y la falta de triunfos de la Selección Boliviana.
“La ilusión de ver al mejor del mundo, lo entiendo, pero después, de vestir camisetas de la Selección Argentina o alentar más a la Argentina que la selección nacional, claramente es algo que no termino de entender”, criticó Rojas.
Según el analista, uno de los factores para que los bolivianos apoyen a Argentina es el desmedido fanatismo por Messi. En Bolivia, al igual que en distintos países, hay cientos de hinchas de la ‘Pulga’ por su trayectoria dentro del fútbol, pero ese no es un indicador para que algunos bolivianos porten la camiseta Argentina, sabiendo que se enfrentará contra Bolivia.
“Otra cosa es lo que te despierta Lionel Messi, pero no por eso pondría por delante a la Selección Argentina o ningún jugador. Hubo un fanatismo desmedido sobre el jugador (Messi), cuando lo importante es el apoyo a la selección nacional”, sostuvo Rojas a Urgente.bo.
El segundo factor, es la falta de triunfos para Bolivia, en la última década. La nueva generación no vivió alegrías con la selección nacional y creció con éxitos de otros como la de Messi, explicó Rojas. “Hemos estado postergados en el fútbol y la selección nos ha regalado pocos motivos para ilusionarnos”.
“Las nuevas generaciones no han vivido eso (triunfos de la Verde) y para ellos es una historia, es parte de la historia y se han criado a otro tipo de éxitos como el de Lionel Messi”, sostuvo.
Muchos bolivianos solo recuerdan la historia de la Selección de Bolivia, como cuando la Verde entró al Mundial del 1994, actualmente no festeja nuevos triunfos. “En el último tiempo, si no en las últimas décadas, seguimos viviendo de lo que ocurrió con la generación que nos llevó al Mundial del 94 y a la final de la Copa América del 97. (…) Claramente es un factor para que muchos aficionados no se les haya despertado ese tipo de fervor”, explicó.
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