28 de diciembre (Urgente.bo).- En noviembre de este año se creó la primera Asociación Boliviana de Víctimas y Sobrevivientes de Abuso Sexual Eclesial. En las últimas décadas, contabiliza medio millar de afectados.
“Hemos decidido crear esta comunidad boliviana con el propósito de articular los esfuerzos, por un lado, jurídicos; por otro lado, legislativos, porque también vamos a hacer propuestas de modificación de legislación para Bolivia en esta materia específica. Igualmente, queremos unificar esfuerzos para la atención de las víctimas de la perspectiva psicológica y espiritual”, indica uno de los representantes de la asociación, Edwin Alvarado, a Urgente.bo.
Alvarado comenta que resulta doloroso conocer que, tanto las víctimas, como sus familias, tienen “desestructuraciones muy fuertes" en cuanto a su personalidad.
“Las consecuencias son muy grandes y entonces pensamos que organizados vamos a ser invencibles. Somos ya personas por encima de los 53 años, de los 50 años, con distintas capacidades que podemos poner al servicio de la causa”, indica.
Alvarado menciona que el objetivo de la asociación es develar la verdad que contrasta con el intento de la Iglesia sobre atribuir las vejaciones al error de una persona, siendo que en la Compañía de Jesús para Bolivia se identificó al menos 9 depredadores sexuales.
Asimismo, sostiene que desde dicha comunidad boliviana se dará el impulso a la demanda que hizo la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio Juan XXIII.
“Ya no vamos detrás de los muertos. Alfonso Pedrajas está muerto, no vamos contra él, Carlos Villamil está muerto, no vamos por él. Hay depredadores vivos, Francesc Peris en España. Hay encubridores vivos y vamos contra ellos. Son encubridores que sistemáticamente han protegido más el prestigio de sus instituciones que los derechos humanos de los estudiantes que fueron puestos bajo su tutela”, expone.
Otro objetivo de la asociación es reponer las relaciones sociales de las víctimas y restaurar las condiciones espirituales y psicológicas por las heridas que quedaron durante 40 años de silencio sobre las vejaciones.
Medio millar de víctimas
Alvarado indica que se estima que en las últimas décadas las víctimas suman medio millar, sin embargo, menciona que podría haber más, ya que solo en el caso de Alfonso Pedrajas (Pica) habría al menos 200 víctimas, además, han salido a la luz casos de otros jesuitas pederastas en otros espacios del país.
“Han sucedido también en ámbitos formativos como los noviciados, hay testimonios públicos en el sentido de que en los noviciados también se ha victimizado a novicios. Y, por tanto, suena doloroso, pero incluso el medio millar podría aparecer un dato discreto”, explica.
Alvarado indica que cada vez hay más testimonios y pruebas de vejaciones. En las últimas 12 horas, la asociación recibió llamadas de personas que desean contar su verdad.