13 de agosto (Urgente.bo).- Una pareja de aves que huyó de las llamas de los incendios forestales, que se registran en Roboré, construyó su nido en una plaza del pueblo, sin embargo ese espacio fue destrozado por gente del lugar y las aves fueron lastimadas una de ellas falleció y la otra fue salvada. Esta es una de las muchas de especies que huyen de su hábitat en llamas para salvar su vida, sin embargo, en su intento de buscar un nuevo refugio en los poblados próximos, son maltratados e incluso cazados para mascotas o para la venta.
El veterinario Jerjes Suárez relató que la situación en Roboré y en otras partes de Santa Cruz que se ven afectadas por el incendio, es demasiado triste porque en tres años de quema se acabó con millones de hectáreas y miles de animales.
“A los animales que salen del bosque los capturan para venderlos en los mercados (…) la gente ve el incendio como si se estuvieran quemando palos y hojas, no es solo eso, sino también animales. En los bosques habitan especies, mamíferos, aves, ahí está su alimento, su cobijo, su casa”, expresó Suárez a Urgente.bo.
Calvario de los animales
Debido a que ya no cuentan con un lugar donde vivir, los animales en Roboré huyen al pueblo para buscar comida y casa. A diferencia de otros años, las plazas se hallan colmadas de especies que solo buscan sobrevivir.
En la fauna, son capturados por la gente para luego ser traficadas y si se hallan heridas o con quemaduras son maltratadas.
“A los (animales) que llegan a los pueblos los esperan para matarlos con honda, otros para venderlos como mascotas, y a otros los niños le dan su palazo jugando, en fin de alguna causa mueren en este apocalipsis que viven los animales en el bosque seco Chiquitano”, relató.
“Están viviendo el apocalipsis por la destrucción, la matanza y la cacería, la destrucción de sus casas”, añadió.
Las especies que sufren por las quemas en Roboré son jaguares; los ocelotes o gato brasileño, un felino de unos 13 a 20 kilos; petas. “Las tortugas ni qué se diga, cuando el fuego los agarra, ya no puede correr, además, hay armadillos, tatúes, loros, parabas y muchas otras”.
Debido a la falta de comida, los gatos brasileños entran a propiedades privadas por gallinas y es ahí cuando son cazadas por la gente. Las aves mueren intoxicadas por el humo del incendio, ya que permanecen en los árboles e inhalan monóxido de carbono.
Suárez manifestó que en los últimos días, a causa de los incendios, atendió quirquinchos, tortugas, ocelotes, tigrillos, parabas, loros y venados.
El veterinario lamenta que no haya un hospital para animales silvestres, pese a que en el sector hay áreas protegidas. Él trata de atender a estas especies con lo que tiene y por ello, pidió ayuda a las autoridades nacionales para el municipio de Roboré, se necesita jaulas, comida, medicamentos y demás.
Cada vez con más desastres
Suárez recordó que los incendios causan estragos hace tres años y cada vez hay más desastres, puesto que hay una destrucción del medio ambiente porque incluso en los incendios se pierden árboles que tardan entre 30 y 40 años para producir frutos.
“He trabajado gran parte de mi vida dedicada a la veterinaria y al campo, hoy por cuestiones de salud trabajo en el pueblo, 22 años de mi vida lo he dedicado al campo, nunca había visto esto, hay partes que nunca se incendiaron, ahora están destruidos”, lamentó el veterinario.
Aseveró que los funcionarios de la Gobernación, del Ministerio o del municipio, prohíben tomar fotografías a los animales quemados con el alegato de que las imágenes podrían herir la sensibilidad de la gente.
Pero para Suárez, es necesario mostrar las imágenes para que la gente tome conciencia y entienda. “Tienen que ver el daño que están causando (…) de lo contrario van a seguir estos pirómanos, incendiando los bosques”, mencionó.
_3.jpg)
