11 de junio (Urgentebo).- Ingrid Quisbert, hija del múltiple deportista boliviano, Wálter “Tataque” Quisbert, pidió un espacio en el Cementerio Jardín, de la zona Sur de La Paz, porque en el Cementerio General no hay un nicho para el tamaño de su cuerpo, mide 2, 25 metros de altura. El luchador falleció a sus 67 años.
El boxeador, basquetbolista y luchador murió anoche. Presentaba un cuadro de diabetes que poco a poco cobró su vida. Los restos serán velados en el salón Las Perlas, ubicado en la calle Antonio Gallardo, zona Gran Poder de la ciudad de La Paz.
“No tenemos dónde enterrar a mi papá, por su tamaño. Pedimos un espacio en el Cementerio Jardín para darle cristiana sepultura. Públicamente pedimos a las autoridades al Gobierno y la Alcaldía, que por favor nos colaboren”, declaró la hija del luchador a la red Unitel.
El 24 de enero del 2018, el deportista contó que inició su carrera a los 17 años de edad que le permitió conocer al menos 24 países del mundo.
Su tamaño le ayudó a ser reconocido e indicó que extranjeros ofrecieron millones de dólares por su esqueleto.
“Lo manejo con discreción, entonces todo se va a saber a su debido tiempo. Son extranjeros, los científicos verán el estudio del físico o por ahí vengo de una descendencia de los incas, tantas cosas. Esto en Centro América, ya me hablaron de hace años, hay mucho interés, les llamó la atención mi tamaño. Pasado los años, me llamaron y estoy acá”, dijo Quisbert en aquella ocasión.
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