El linchamiento de dos personas y probablemente de otras tres personas ha puesto en evidencia que en el Chapare de Cochabamba el Estado no tiene presencia. Hasta ahora los cuerpos sin vida de dos hombres eliminados en Shinaota el jueves pasado no han podido ser recuperados y las autoridades buscan confirar si las otras víctimas están con vida o no.
Según reportes oficiales, otros tres individuos estarían aún retenidos por comunarios, quienes se niegan a permitir el ingreso de las autoridades para el levantamiento de los cuerpos y la liberación de los retenidos.
“Se produjo un linchamiento de cinco personas, las cuales están relacionadas —de acuerdo al reporte preliminar— a lo que sería la modalidad de robo de vehículos”, informó el Ministtro de Gobierno, Roberto Ríos .
Uno fue ahorcado y el otro quemado vivo, las víctimas son Richard Mamani Rojas y Richard Romero Ala quienes fueron linchados en un chaco alejado de Shinahota la madrugada del jueves.
Según el reporte de pobladores de la zona, los linchados fueron detenidos en Senda 3, Chimoré, cuando intentaban robar dinero de una casa. Luego fueron llevados a Shinahota donde los acusaron de robar vehículos.
Las autoridades intentan ingresar al lugar desde el jueves, pero enfrentan resistencia por parte de comunarios que impiden el acceso de la Policía y la Fiscalía. Ríos explicó que se están coordinando acciones conjuntas con el Ministerio Público para concretar el levantamiento legal de los cuerpos y prevenir nuevos actos de violencia.
“Según el reporte de la Policía departamental de Cochabamba, existirían dos personas fallecidas y otras tres retenidas”, precisó el ministro.
La Defensoría del Pueblo y organismos de derechos humanos han exigido en las últimas horas que se garantice la vida e integridad de los tres retenidos y que se restablezca el orden en la zona. Se espera que, en las próximas horas, las fuerzas del orden puedan acceder con seguridad al sector para evitar más tragedias.
El director departamental de la Felcc de Cochabamba, coronel Vanderley Flores, ratificó que ya se abrió una investigación para identificar a los responsables de los crímenes. “Uno de los cuerpos tenía antecedentes penales; el otro no. Las circunstancias y la brutalidad del hecho no justifican, bajo ninguna normativa, una ejecución extrajudicial”, afirmó.
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