Este sábado, en el camino a Calamarca, un grupo de marchistas que son parte de la columna que avanza hasta La Paz gritó a todo pulmón: “Lucho, no estás solo!” y a continuación cantó la cueca “Viva Mi patria Bolivia”. Los marchistas lo hicieron con entusiasmo mientras avanzaban al trote y para hacer frente a la fría mañana del altiplano y a la menuda lluvia que cae desde hace dos días.
Provenientes de diferentes puntos del país, los marchistas que inicialmente se agruparon en Caracollo o que luego se sumaron en el trayecto, representan a los campesinos, indígenas y sectores sociales populares que oyeron el llamado a sumarse a la marcha en defensa del gobierno de Luis Arce Catacora. "Aquí está el pueblo unido, estamos todos porque todos hemos definido resolver nuestros problemas pacíficamente vía democracia. El pueblo se ha manifestado, el pueblo ha decidido y el pueblo va a defender su voto", sostuvo el jefe de Estado. La movilización ingresará a la ciudad de La Paz, en un contexto de polarización política que se ha expresado en octubre y el mes que finaliza. Así, esta movilización busca encarar los obstáculos que enfrentó el gobierno, incluso de manera interna, y articularse de mejor manera con las organizaciones que son parte del instrumento político.
“Esta marcha es la manifestación de la recuperación de la iniciativa por parte del Movimiento Al Socialismo. Había que hacerlo y lo hicieron. Se animaron a hacer una marcha, no solo para mostrar musculatura, sino que es una suerte de mecanismo para la agrupación de las organizaciones sociales, para recordar de dónde venimos, qué somos los sectores sociales. Esta es una medida para cohesionar”, explicó la analista Susana Bejarano, quien el viernes pasado estuvo en un punto de la marcha para percibir lo que estaba ocurriendo allá.
La llamada #MarchaporlaPatria se ha nutrido cada día desde el pasado lunes, cuando empezó su trayectoria desde Caracollo rumbo a la ciudad de La Paz. Liderada por Evo Morales, presidente del Movimiento Al Socialismo, la columna avanzó de acuerdo a una agenda que este sábado les llevó hasta Calamarca. Diariamente, la marcha se nutría con dos o tres mil representantes de las diferentes organizaciones sociales y populares que son parte o son aliados del partido de gobierno. El sábado llegó a Caracollo y este domingo descansará en Achica Arriba, para ingresar a La Paz este lunes.
Evo Morales manifestó que “cuando nos unimos nadie nos gana, ni electoralmente ni socialmente”. Ratificó que esta movilización multitudinaria llegará el lunes a “reventar La Paz”. Y estimó que la marcha pasará el millón de caminantes cuando llegue a la sede gobierno, este 29 de noviembre. “Será una fiesta. Pasado mañana vamos a reventar La Paz con alegría; vamos a reventar La Paz con una vocación democrática, y con una convicción revolucionaria”, dijo.
Esta marcha ha sido la respuesta a la coyuntura política que entre octubre y noviembre llevó a que el gobierno del presidente Arce retroceda en dos leyes, ante la creciente movilización social, liderada por los comités cívicos y con el respaldo de organizaciones que tradicionalmente respaldan al MAS. ¿Por qué ha ocurrido eso? “Porque pese a que se han realizado las elecciones, en las que hubo un contundente ganador, desde el inicio del gobierno de arce, hubo intentos por facturar la legitimidad del gobierno de Arce”, explica la analista Susana Bejarano.
La caminata ha sido también un espacio de convocatoria hasta donde han llegado representaciones de organizaciones sindicales, campesinas e indígenas. Pero también las autoridades del Estado que están bajo control del Movimiento Al Socialismo. El Presidente Arce estuvo en el inicio de la movilización y este sábado. En ambos momentos, el jefe de Estado expresó su agradecimiento por el respaldo de las mujeres y hombres que fueron a la carretera para avanzar hacia la sede de gobierno.
“Si bien es cierto que esta marcha fortalece a Evo Morales, también fortalece al gobierno; no me imagino a otra persona que no sea Evo cohesionando la marcha y lo hace en defensa del gobierno de Arce. Yo no veo a Evo dando instrucciones a Luis Arce o buscando competir con Luis Arce. Por el contrario, ambos expresan una buena relación y eso contribuye a la gobernabilidad”, explica Bejarano y refuerza su posición, recordando las tensas relaciones que la expresidenta Cristina Fernández y el actual presidente de Argentina, Alberto Fernández, mantienen pese a que son parte del mismo proyecto político.
La marcha ha sido convocada para expresar el respaldo al gobierno de Luis Arce, desde la carretera y desde las calles, como podrá ocurrir este lunes, cuando la columna llegue a la ciudad sede de gobierno. Sin embargo, de acuerdo con las palabras de Bejarano, esta movilización tiene un sentido estratégico: cohesionar al instrumento político del gobierno, más que mostrar musculatura en el contexto de la polarización política del país.
Recordó que en los dos conflictos recientes, relacionados con la fiscalización y control a las ganancias ilícitas el oficialismo no pudo hacer frente a la campaña de desinformación que instlacó la oposición. “En el MAS también hubo increíble desinformación y no pudieron generar certeza”, dijo la analista.
También comentó que el gobierno de Luis Arce “no tiene cierta habilidad que sí la veía en el gobierno de Evo para gestionar con algunos sectores aquello que podría convertirse en problemas”. En ese contexto se realiza la marcha pues es una oportunidad para que los diferentes sectores confluyan el respaldo a la gestión gubernamental y el proyecto político.
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