La noche de este martes, el fiscal de Cochabamba, Oswaldo Tejerina dio por resuelto el caso de las dos muertes ocurridos ayer lunes en el municipio de Colcapirhua. Señaló a un oficial de la Policía Boliviana que usó su arma de reglamento, por lo que ha sido detenido y será imputado por el delito de homicidio

“Inicialmente el efectivo policial fue arrestado, dentro de las reglas del debido proceso; sin embargo, con la obtención de elementos materiales y la declaración del mismo uniformado que reconoce el uso de arma de fuego, se procederá a su aprehensión. Es importante informar que este efectivo policial también se encuentra herido y fue sometido a una cirugía para la extracción de 18 esquirlas producto del disparo de una escopeta”, señaló el fiscal Tejerina.

La madrugada del lunes, vecinos y comunarios de Colcapirhua hicieron frente a un operativo municipal, con respaldo policial, para el ingreso de basura al botadero de la zona. El hecho desencadenó violencia y en él hubo las dos muertes y más de 10 heridos.

Según el informe de Tejerina, la detención se produjo después de que el oficial policial declarara haber utilizado su arma reglamentaria durante los enfrentamientos del lunes.

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"Esta persona declara haber hecho uso de su arma de fuego. Es en ese marco que se procede al arresto, se está procediendo ahora a su aprehensión y se va a imputar a esta persona por el delito de homicidio, toda vez que él reconoce haber usado esta arma de fuego".

El Fiscal enfatizó que la investigación cuenta con elementos probatorios sólidos para sustentar la imputación: secuestro de armas de fuego y colección de casquillos (sujetos a pericia para establecer coherencia), la declaración del sindicado, elementos testificales que fortalecen la hipótesis fiscal.

"Como Ministerio Público tenemos la posibilidad de decir que este caso está esclarecido... existe un indicio material fuerte que nos ayuda a establecer la probable responsabilidad y la autoría material", agregó.

El Fiscal también informó que, durante el registro del lugar del hecho, se pudo colectar 16 vainas servidas (casquillos), 13 corresponderían a un arma nueve milímetros y 3 a una escopeta, explosivos y otros elementos que están siendo procesados por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF).

“En las próximas horas vamos a establecer el origen de los mismos y el tipo de calibre con precisión, esperamos poder enlazar estos elementos materiales y resolver este hecho con la debida diligencia de acuerdo a norma”.