La mañana de este lunes, la Canciller del Estado, Celinda Sosa, y la encargada de Negocios de Estados Unidos en Bolivia, Debra Hevia, se reunieron en el Ministerio de Relaciones Exteriores en el marco de una convocatoria boliviana a la representante por hechos que se consideran como “una intromisión en asuntos internos”.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia informa que este lunes se convocó a la Encargada de Negocios de Estados Unidos, Debra Hevia, con el propósito de hacerle conocer la preocupación y establecer un reclamo sobre una serie de pronunciamientos y acciones que se realizaron por parte del personal de la Embajada de Estados Unidos, que se consideran como una intromisión en asuntos internos”, dice el comunicado oficial de la Cancillería.
Hace unos días, el 13 de junio el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, acusó a la embajada estadounidense de urdir un “golpe blando” en contra del Gobierno de Luis Arce. Un día después esa misión diplomática emitió un comunicado mediante el cual desmentía las acusaciones lanzadas por Montenegro.
La reunión realizada este lunes se desarrolló con carácter reservado en los ambientes del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El Estado Plurinacional promueve una política exterior basada en los principios de igualdad, no injerencia y respeto a la soberanía, en el marco de las normas del derecho internacional que regulan las relaciones diplomáticas. En esta línea, rechaza cualquier tipo de acción que promueva la injerencia en nuestro país”.
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