26 de junio (Urgente.bo).- Este jueves, en el evento “Que la verdad nos mueva”, se presentaron cinco estudios que evidencian las múltiples dimensiones de la violencia sexual contra niñas, niños, adolescentes y mujeres en Bolivia. Los resultados son alarmantes y llaman a actuar colectivamente sobre esta problemática.
Los cinco estudios fueron elaborados por el Instituto de Investigaciones de Ciencia del Comportamiento (IICC) de la Universidad Católica Boliviana (UCB) junto al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Save the Children, Misión Internacional de Justicia (IJM). Un aporte que evidencia de forma concreta sobre los contextos, causas y barreras que enfrentan las víctimas de violencia sexual.
“Cada uno de los estudios habla específicamente sobre un tema que está relacionado con la violencia sexual. Desde cómo reacciona el sistema de justicia para enfrentar a la violencia sexual (...) hasta cuáles son esos números negros de denuncias que no han sido publicados, que no sabemos con certeza, de quienes han sido víctimas en algún momento de sus vidas”, explicó Adriana Bueno, directora interina y líder de proyecto y monitoreo de IJM, en contacto con Urgente.bo.
Los estudios abordan los temas: Normas sociales de género, que evidencian las persistentes creencias y costumbres que perpetúan la violencia sexual; el sistema judicial lento y revictimizante, que revela que solo el 33% de los casos (de violencia sexual) denunciados avanza a la etapa preparatoria.
Por otro lado, los obstáculos estructurales y cultura de silencio es otro tema abordado, además de el incesto y violacion dentro del hogar que lanza una cifra alarmante del 42% de casos de violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes que ocurre en el entorno familiar.
“A qué nos referimos, el lugar donde los niños, las niñas, los adolescentes deberían de sentirse mucho más protegidos, es uno de los lugares donde más violencia pueden ejercer. La mayor cantidad de las víctimas, en realidad, salen desde los mismos hogares”, agregó Bueno.
Asimismo, el estudio sobre violencia en entornos digitales evidencia que el 16,4% de NNA ha recibido imágenes o mensajes sexuales sin consentimiento.
Los datos arrojados por estos cuatro estudios no solo son cifras, “son una llamada ineludible a la acción”, desde las autoridades gubernamentales hasta la misma sociedad.