22 de diciembre (Urgente.bo).- Alberto Quelali, presidente de la Federación de Juntas Vecinales 6 de Marzo de El Alto, afirmó que los choferes de esta urbe están haciendo su “agosto” con el cobro de tarifas que llegan hasta Bs 5, tras el incremento en el precio de los combustibles, y denunció que los trameajes se incrementaron hasta en un 100%.
“Es un incremento arbitrario. Los costos han subido hasta cinco bolivianos. Nosotros prácticamente pedimos al Gobierno Municipal, como autoridades llamadas por ley, que se realice un control. La situación es difícil y la población ya está empezando a sufrir”, dijo Quelali a Urgente.bo.
El dirigente vecinal afirmó que este incremento no se justifica, ya que la mayoría del transporte público en esa urbe funciona con gas natural vehicular (GNV). “La mayoría de los minibuses en El Alto, casi el 100%, funcionan con GNV y no debería haber problema. El incremento debería ser bajísimo, porque el costo no es el mismo que para los vehículos que trabajan con gasolina o diésel”, sostuvo.
Asimismo, señaló que este problema también derivó en un aumento del trameaje e incluso denunció que en algunas zonas los minibuses reducen el número de vehículos en circulación para obligar a los usuarios a pagar lo que decide el conductor.
“El trameaje se incrementó casi al 100%. Además, los choferes se están escondiendo; parece que ya han hecho su estudio de cómo pueden generar más utilidades. Por ejemplo, un sindicato que tiene 200 vehículos solo hace trabajar a 50 por turnos y la gente paga lo que les imponen por desesperación y necesidad de trasladarse. Cobran lo que quieren”, lamentó.
El pasado miércoles, el Gobierno dio luz verde al Decreto Supremo 5503, que elimina la subvención a los carburantes y, por ende, provoca el incremento en el precio de los combustibles.
Tras el anuncio, el sector del transporte en esa urbe y otras ciudades incrementó los pasajes por determinación de sus dirigentes. En el caso de El Alto, el alza llegó hasta 50 centavos, ya que el pasaje único era de Bs 1,50 y ahora, de manera general, se cobra Bs 2. “No se pueden aprovechar de la familia humilde. Pediremos que se realice un estudio de costo real con bases técnicas”, concluyó.
