La Paz, 28 de octubre (Urgentebo).- Las relaciones económicas, en especial la renegociación de la venta de gas natural, puden ser el tendón de Aquiles para Bolivia. Dos analistas ven que el escenario hidrocarburifero podría estar en peligro si es que el presidente electo de la ultraderecha del Brasil, Jair Bolsonaro, decide cerrar un viraje en la relación con el gobierno del presidente Evo Morales.
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Este domingo, el candidato por el Partido Social Liberal (PSL) se hizo presidente de los brasileños con el 55.4% de votos, frente al izquierdista Fernando Haddad por el Partido de los Trabajadores (PT) que obtuvo el 44.3%.
Bolsonaro es contrario a la ideología que practica Morales, incluso el electo mandatario brasileño en su primer discurso que mandó a través de su cuenta en Facebook dijo que el Brasil quería cambios y dejar de estar coqueteando “con el comunismo y con el populismo y con el extremismo de la izquierda”.
¿Pero qué le espera a Bolivia? El analista político Marcelo Silva considera que el tema de la renegociación del gas que Bolivia exporta a Brasil, puede tener ciertas barreras, dijo que no cree que Jair Bolsonaro quiera hablar del tema gas con Evo Morales.
“No creo que (Bolsonaro) pueda iniciar el tema de la negociación del gas con Evo Morales con mucha libertad, problabemente exista una expectativa, lógica y política de Bolsonaro de ver los resultados de las elecciones del 2019 en Bolivia para concretar el acuerdo del gas”, declaró el experto al portal Urgentebo.
Además aseguró que el Brasil hizo modificaciones a su matriz energética en los últimos años, por lo tanto aseguró que el gas boliviano no le será tan imprescindible de aquí a un tiempo.
Según La Razón, hasta el primer trimestre de este año envíos de gas natural boliviano al mercado brasileño se incrementaron en 19,2% con relación a igual período de 2017, al haber pasado, en promedio, de 18,7 millones a 22,3 millones de metros cúbicos día (MMm3d).
Para el analista Marcelo Arequipa, la victoria del líder del PSL, en lo político, significa que en Latinoamérica la llamada derecha quiere volver a recomponerse en “un nuevo boque político” y dejar de lado a los gobiernos socialistas como del venezolano Nicolás Maduro y del boliviano Evo Morales.
En lo económico manifestó que la venta de gas al Brasil podría significar un problema. “Un primer escenario es que el Brasil ya no decida comprarnos gas o decida comprarnos mucho menos”, advirtió.
Pero el más contento con la victoria del líder de la ultradrecha en el vecino país el presidente de la Argentina, Mauricio Macri, complementó Arequipa, porque ambos paises obligarían a Bolivia a renegociar los precios del energético.
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