19 de agosto (Urgente.bo). – La pandemia por el COVID-19 ha generado afectaciones de todo tipo en la salud mental de las personas. Los cambios drásticos, la incertidumbre, el estrés y la vulnerabilidad penetran en la mente produciendo alteraciones como ansiedad, depresión y trastorno del sueño, siendo las mujeres con niños menores de 5 años, la población más afectada, explicó el doctor Óscar Franco, epidemiólogo y director del Instituto Social y Preventiva de la Universidad Berna.
“Un estudio en China con más de 5 mil personas demostraba como el 20% de la población reporta problemas de sueño, un 15% ansiedad y estrés y el cuarto de la población depresión”, detalló el especialista.
Sostuvo que otro estudio en el Reino Unido con unas 15 mil personas se evidenció como los niveles de insomnio pasaban del 15%, justo antes de la pandemia, a niveles de 25% en los meses de marzo y abril, cuando la epidemia se consolidaba en esta región.
“Lo que estamos viendo son problemas generalizados de salud mental que no están recibiendo la prioridad suficiente para su prevención, diagnóstico y tratamiento”, añadió Franco en entrevista con France 24.
“El sueño es una actividad muy importante, de hecho, ¼ y 1/3 de nuestra vida estamos durmiendo. Juega un papel muy importante en nuestro sistema inmune, en las defensas, en como respondemos a las vacunas, también juega un papel muy importante en la salud mental, se ha relacionado con depresión, también en nuestro ánimo puede generar irritabilidad y falta de energía si no se duerme bien”, añadió.
De acuerdo con Franco, la falta de sueño también se ha relacionado con enfermedades crónicas: como la obesidad, la hipertensión y las enfermedades del corazón.
Siete recomendaciones para el trastorno del sueño
1 Tener horarios y rutinas estrictas de cuando se va a dormir, se despierta, cuando se descasan y cuando se come etc.
2 Realizar rutinas de ejercicios dentro de la casa
3 Seguir una dieta alimenticia saludable y evitar la cafeína en la tarde y en la noche.
4 Reservar la cama para dormir y actividades sexuales (no para trabajar o ver televisión).
5 Permitir la entrada de luz natural al hogar, abrir las cortinas y las ventanas durante el día.
6 Evitar la exposición a las pantallas de los celulares y de los computadores por el constante trabajo.
7 Tratar de evitar las siestas o reducirlas al máximo por que pueden generar un descontrol en los periodos de sueño en las noches.
Franco subrayó que si estas recomendaciones no se pueden seguir y el problema continúa es importante que las personas busquen ayuda profesional de un especialista.
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