9 de junio (Urgente.bo).- Panaderos indican que la harina subvencionada no abastece a todos y el incremento de precio del quintal en mercados obliga al sector a reducir la cantidad de la producción del pan, disminuir su peso y, en algunos casos, incrementar el precio de venta a 0,70 ctv.
“El tema de la harina es muy fundamental dentro de lo que es el panificador hacia su comercio y resulta que ahora el problema es que no todos los panaderos están recibiendo harina subvencionada”. De aproximadamente 10 mil unidades productivas a nivel nacional, solo 2 mil reciben harina subvencionada por parte del Estado a través de Emapa, dejando al resto “en la incertidumbre y trabajando con el mercado”, dijo el dirigente del sector panadero, Dandy Mallea a Urgente.bo.
El precio del quintal de harina en el mercado se incrementó hasta incluso el doble y ahora bordea los Bs 500. “En el mercado en este momento está bordeando casi los Bs 500, Bs 470, Bs 480, cuando hace unos meses estaba en Bs 290”, señala Mallea. A este problema se suma el costo de otros insumos esenciales como la manteca, cuyo precio también subió: “La manteca está en Bs 420, Bs 440. Si bien está subvencionada, pero no llega al grueso de los panificadores”.
Por este factor, muchos panaderos han modificado su manera de producción, ahora producen menos del 50% para la venta, algunos con un bajo gramaje de lo establecido y otros incrementaron el precio.
“El pan ya es más pequeño de lo que normalmente era. Ahora ya se está trabajando con 50 gramos, y en algunos casos, mucho menos”, lamenta el dirigente, quien agrega que “en muchos lugares se está aplicando la modalidad de dos unidades por 1,50 bolivianos, aun así hay pérdida para nuestro sector”, explicó.
La situación es más crítica, especialmente para quienes no reciben insumos subvencionados. “A esos no les conviene trabajar a precios de 0,50 bolivianos, por eso hace un par de meses se tomó la decisión de que cada unidad productiva asuma su propia responsabilidad”. Es decir, se liberalizó el precio y peso del pan entre los que no son beneficiarios de la subvención.
Por lo que Mallea pide que se amplíe la cobertura de la harina subvencionada. “El gobierno debería dar lugar para esta gente, los 8 mil panificadores que no están recibiendo la ayuda. Porque somos nosotros los que complementábamos con el mercado nacional, con nuestros productos”, indicó.
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