La Comisión Interamericana de Derechos Humanos negó la aplicación de medidas cautelares solicitada por la familia de la expresidenta Jeanine Añez, quien se encuentra recluida en el penal de Miraflores (La Paz), y pidió que el Estado continúe garantizando las condiciones dignas de detención, en cumplimiento con los estándares interamericanos mínimos en la materia.
“Al respecto, considerando lo anterior y la información aportada por ambas partes, la Comisión considera importante que el Estado continúe garantizando las condiciones dignas de detención, en cumplimiento con los estándares interamericanos mínimos en la materia. Lo anterior, proveyendo de atención y/o tratamiento médico físico y mental adecuado, especializado y continuo, ya sea dentro o fuera del centro penitenciario, buscando, en la medida de lo posible, el consenso con los médicos de confianza de la propuesta beneficiaria y su consentimiento informado. Asimismo, la Comisión considera fundamental la permanencia de aquellas medidas adoptadas para garantizar los derechos de la señora Añez, como las visitas y el acompañamiento permanente de sus familiares”, señala la carta enviada por la secretaria ejecutiva de la CIDH, la mexicana Tania Reneaum.
La carta de Reneaum fue enviada al Ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Rogelio Mayta, y hace unos minutos los canales oficiales del gobierno la hicieron circular.
En septiembre pasado, el Gobierno boliviano respondió la solicitud de CIDH sobre el estado de salud de la expresidenta transitoria Jeanine Áñez, quien se encuentra en una prisión de forma preventiva, y solicitó que se declare "inadmisible" la petición de medidas cautelares.
El procurador general del Estado, Wilfredo Chávez, indicó que como Estado encontraron "que no existen elementos" que fundamenten la solicitud requerida por la defensa de Áñez y que encuentran que es "inadmisible".