Daniel Vargas tiene 12 años, vive en el cruce de Villas en la ciudad de La Paz, junto a sus padres, dos hermanos menores y su perro Rocky, a quien considera su mejor amigo, pues comparte juegos con él durante varias horas del día.
Después de un año, Daniel se encuentra ansioso porque pronto romperá su alcancía y contará moneda tras moneda el dinero ahorrado durante todo el 2023. Él fue muy responsable al guardar una moneda del dinero que le daban sus padres para los recreos escolares y cada día la depositaba en la alcancía de perro buldog que tiene al lado del televisor, sobre la cómoda de su dormitorio.
Educación financiera para niños
De manera complementaria a la educación en el hogar y la escuela, es necesario que los padres consideremos también incorporar a la educación financiera en la formación de nuestros hijos. El preparar a las futuras generaciones para alcanzar sus metas financieras con conocimientos sobre el ahorro puede traer grandes beneficios, motivándolos para el manejo adecuado de su economía y éxito profesional.
La educación financiera en menores puede aportar al desarrollo de habilidades esenciales para la vida como el crear un presupuesto, planificar el ahorro, la inversión, tomar decisiones responsables con su dinero, se puede prevenir el endeudamiento y promover al pago responsable de créditos. Orientar a los niños a tomar el control de sus finanzas, les permite alcanzar sus metas y sueños, sus aspiraciones y desarrollo profesional; además del disfrute de la vida.
Algunos consejos de educación financiera para los niños
- Se puede enseñar educación financiera a través de juegos de mesa como Monopolio o Banco Inmobiliario.
- Realizar actividades lúdicas como crear un presupuesto familiar, organizar una tienda de garaje de muñecos o jugar a "ahorrar para una meta".
- Visitar las ferias y talleres de educación financiera para niños organizados por instituciones financieras y organizaciones no gubernamentales.
¡Llegó el momento! El pequeño Daniel, con la ayuda de sus padres, hace el recuento de sus ahorros que llegaron a sumar 500 bolivianos. A la pregunta de ¿Qué hará con el dinero? la respuesta sorprende a sus progenitores: “donar a un albergue de animales maltratados y abandonados”.
Y después de haber cumplido con su noble acción, Daniel se prepara para visitar la feria de las Alasitas en busca de una nueva alcancía e iniciar, nuevamente de manera responsable, con el ahorro de dinero durante este año.
En un momento en que se atraviesa momentos difíciles en la economía, tanto a nivel mundial como nacional, el dotar de las herramientas necesarias para un buen manejo financiero a nuestros hijos puede ayudar a construir un futuro mejor y financieramente saludable para las futuras generaciones.
///
