Abril 23, 2024 [G]:

Día crítico, desde hoy, la gente vive con recursos prestados del planeta


Jueves 29 de Julio de 2021, 8:30am






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29 de julio (La Información).- Hoy, jueves 29 de julio, se celebra el Earth Overshoot Day (Día del Sobregiro de la Tierra), es decir, en estos momentos la humanidad está viviendo ‘de prestado’. Desde esta fecha y hasta finales de 2021, el consumo de los recursos de la naturaleza (agua, combustibles fósiles, alimentos, etc.) será superior a todos los que el Planeta puede regenerar, según advierte Global Footprint Network.

Pero, ¿cómo hemos llegado a esta situación? La humanidad utiliza un 74% más de los recursos que los ecosistemas pueden regenerar, por lo que, si se quisiera mantener el ritmo de demanda actual, necesitaríamos el equivalente a 1,7 veces la Tierra. Un préstamo que heredarán las generaciones futuras.

En 2020, el Día del Sobregiro de la Tierra se retrasó hasta el 22 de agosto a causa de la pandemia de la COVID-19. Este año, sin embargo, la fecha coincide con la que se estableció en 2019. Si el año pasado la crisis sanitaria y el confinamiento paralizaron a todo el mundo, consiguiendo mejorar la salud del Planeta, en 2021 hemos vuelto a los niveles anteriores y a un ritmo incluso mayor. Motivo por el que la fecha se ha adelantado hasta tres semanas.

En 2020 hubo una menor demanda de los recursos naturales a raíz de la pandemia, dejando claro que se puede vivir en un Planeta más limpio y respetuoso con el medio ambiente con el cambio de los modelos de consumo y producción actuales. En este contexto, descubrimos que la salud de las personas está íntimamente ligada a la de la Tierra, nuestro hogar.

Este año, el balance es uno de los peores desde que el mundo entró en déficit ecológico, en la década de 1970

Sin embargo, a pesar de las enseñanzas del año pasado, este año se ha incrementado en un 6,6% la huella de carbono, y se ha disminuido en un 0,5% la biocapacidad forestal mundial, acelerada por la deforestación del Amazonas. Datos que demuestran la urgencia de impulsar una recuperación económica sostenible en la que todos los agentes sociales tengan en cuenta los límites del Planeta. De hecho, según las Cuentas Nacionales de Huella y Biocapacidad (NFA, por sus siglas en inglés), basándose en datos de Naciones Unidas (ONU), el balance es uno de los peores desde que el mundo entró en déficit ecológico, en la década de 1970.

Agbar, un factor clave en la huella ecológica global

En línea con la hoja de ruta de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, el grupo Agbar demuestra su compromiso con el medio ambiente mediante soluciones innovadoras en torno a la gestión sostenible del agua, los recursos naturales y la salud ambiental para la agricultura, la industria y las ciudades.

La compañía trabaja en la reducción de la huella ecológica global, buscando liderar la transición hacia un modelo productivo y de ciudades más sostenibles y resilientes. Con diferentes soluciones tecnológicas y sistemas avanzados de ayuda a la toma de decisiones, los cuales hacen posible una gestión más eficiente de las infraestructuras de agua, Agbar ha ahorrado desde 2017 unos 36,5 hm3 de agua en España. Además, en 2020 logró cubrir con energía ‘verde’ el 99,4% de sus necesidades energéticas, lo que equivale al consumo anual de electricidad de cerca de 84.000 hogares.

DINAPSIS, la red de hubs de innovación y transformación digital del grupo, ha desarrollado una herramienta digital que permite analizar, mediante simulaciones, la capacidad de las principales infraestructuras de un territorio para hacer frente a los efectos de los fenómenos climáticos extremos y evaluar medidas alternativas para mejorar la resiliencia de la zona. Dicha red fue seleccionado a finales del año pasado como uno de los 101 Ejemplos Empresariales de Acciones #PorElClima en reconocimiento a su compromiso ante el cambio climático.

Asimismo, Agbar es pionera en la economía circular y el reaprovechamiento de los recursos. Así, uno de sus proyectos más destacados es la transformación de las plantas de tratamiento de agua en biofactorías, con el objetivo de darle una nueva vida al agua para nuevos usos, revalorizar los residuos, lograr la autosuficiencia energética y tener cero impacto ambiental. Ejemplo de ello es la biofactoría Sur de Granada, gestionada por Emasagra, que ha conseguido que prácticamente el 100% del agua depurada se reutilice para el riego de cultivos; los lodos arenas y grasas se valoricen como abono en agricultura o jardinería, y se alcance la autosuficiencia energética durante algunos meses del año. Su modelo de gestión ha sido reconocido como buena práctica por la publicación European Circular Economy Stakeholder Platform.

Además, Agbar impulsa el desarrollo de modelos respetuosos y responsables con el clima y el entorno a través de la implantación de infraestructuras verdes (soluciones basadas en la naturaleza o la naturalización de instalaciones, tanto en el ámbito urbano como en espacios de interés natural, preservando la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que se generan) y una economía baja en carbono. Un caso paradigmático lo constituyen los humedales artificiales de depuración de Illa de Mar y l’Embut (Delta del Ebro), gestionados por Agbar. En 2020 fueron declarados reserva natural de fauna salvaje por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña. A día de hoy, es una zona de alto interés ornitológico, que ofrece espacios idóneos (refugios, zona de alimentación y nidificación) para la observación de aves, algunas de ellas amenazadas de desaparición, paseos naturalistas y educación ambiental. Con actuaciones prácticas como las de Agbar se contribuye a la preservación del medio ambiente y a intentar retrasar la fecha del día más crítico para el Planeta.

REALIZADO POR BLUEMEDIA STUDIO

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